Una amiga me explicó que si bien no podíamos controlar lo que los demás hacían, sí podíamos encaminar nuestros sentimientos al respecto; así que tras la idea de ser el plan C de alguien, ésta mañana intenté éste ejercicio que planea -y casi sube- lo que debería ser una caída en picada... salió ésta carta de propuestas decentes que espero un día entienda.
Apreciado Doctor C.....,
Le propongo que empecemos con el
verbo “correr”, pero quiero que sepa que me fatigo fácil, por lo que hará falta
un poco de paciencia de su parte para superar cualquier tipo de resistencia que
mi pequeño cuerpo quiera oponer. Por supuesto que no me aparto de la posibilidad de que en
un ataque de caballerosidad y antes de rendirse usted me cargue,
así que podríamos continuar con los verbos “correr” y “cargar” perfectamente
relacionados para el plan que le propongo sea el C, o podríamos intentar
con “caminar” en cambio de “correr” y “cabalgar” en cambio de “cargar” en su orden conjugados. En
todo caso, sabré agradecer su caballerosidad, ya sabe que es usted quien pone
el ritmo.
Antes o después, no importa
cuando, le sugiero “cantar”, es un verbo liberador, tararear la realidad o inventar
una mentira y ponerle música, cualquiera de las dos podría funcionar para sacar
el rockstar que lleva adentro, claro que he advertido en antaño que para eso no requiero
de un verbo por C, creo que con el
sustantivo de su nombre que también empieza por la C será suficiente.
Está de más decirle que usted siempre
podrá contar, cazar y en mi caso yo podré coquetear, pero usted no lo vaya a hacer porque puede que le cobre
segundo a segundo cada pieza que dejó de bailar.
Además de todo –aunque ya después
de finalizado lo que hoy se me antoja inconcluso- conseguiremos callar en paz,
calmar las ansias de conjugar verbos no
permitidos por exceso o por defecto, y en todo tiempo con algo de suerte catar vinos y
cervezas podría cuadrar.
Quedan en la remojo verbos que con usted no sé cómo usar, conceptos
como catapultar, calentar, colorear o cosechar … como ve, podemos hacer algo y aunque "encontrar" no esté en la lista, confesar sí está.